Los 5 tipos de formación para empresas que puedes encontrar hoy en día 💼

Como un jardín bien cuidado, la formación para empresas necesita atención y esfuerzo para dar frutos. Sin embargo, se sostiene como uno de los mejores métodos para triunfar en un mercado tan competitivo.

Pero la formación para empresas beneficia a cada empleado de una forma única, brindándoles herramientas para desarrollar su máximo potencial mientras adquieren un compromiso profesional elevado.

Tanto si eres el propietario de un pequeño negocio como el director general de una multinacional, este artículo te proporcionará valiosos conocimientos sobre cómo invertir en esta enseñanza y alcanzar tus objetivos.

En el vertiginoso mundo empresarial actual, existen muchos tipos de formación, cada uno con sus propias ventajas. A continuación, exploraremos las distintas alternativas y la relevancia que tiene implantarlas en tu organización.

¿Qué es la formación para empresas?

La formación corporativa es un requisito en el mundo empresarial moderno. Abarca el proceso de dotar a los empleados de los conocimientos y competencias necesarios para desempeñar sus funciones con eficiencia.

El principal objetivo es aumentar la rentabilidad, competitividad y productividad invirtiendo en el recurso más vital: el personal. Las empresas deben estar al día de las prácticas más recientes a este respecto para mantenerse por delante de su competencia, así como atraer a los mejores talentos.

Imagina que una tecnológica ha identificado la necesidad de formar a sus empleados en habilidades de programación avanzadas para poder crear soluciones más innovadoras.

He aquí un ejemplo del proceso de formación de una empresa como esta:

• Identificación de los objetivos de aprendizaje específicos
• Diseño del programa con expertos
• Implementación de la formación, brindando recursos en distintos formatos
• Evaluación y retroalimentación
• Fomento de la continuidad del aprendizaje

7 ejemplos de formación en la empresa que puedes poner en práctica hoy mismo

Para maximizar el potencial de tu personal, aquí tienes 7 ejemplos de formación laboral que puedes poner en práctica desde ahora:

Formación onboarding

Con el propósito de garantizar la integración de los nuevos empleados, la formación de incorporación es imprescindible. Esta proporciona una introducción a la cultura, los valores y los procesos de la empresa.

Debe incluir una sesión de orientación con un recorrido por las directrices empresariales, además de una presentación del equipo y del puesto. También se les debe informar sobre los servicios o productos ofrecidos para que comprendan cómo estos encajan en el mercado.

A su vez, es aconsejable una revisión de las políticas de seguridad y confidencialidad, así como una visión general de las expectativas de rendimiento. Esto garantiza que los empleados comprendan sus responsabilidades con claridad.

Por último, debe abordarse cualquier competencia necesaria para el puesto. Estos planes de formación para empresas pueden dar a los nuevos empleados la confianza y la preparación requerida para desenvolverse con éxito.

Formación técnica

Es un componente crítico de la formación para empresas, que asegura conocimientos necesarios para ejecutar tareas especializadas dentro de la organización.

Pero es especialmente vital para las empresas que forman parte de la industria tecnológica, donde los trabajadores necesitan mantenerse al día de los avances más recientes. Esto incluye desde el desarrollo de software, la seguridad en redes hasta la gestión de bases de datos.

Además, la formación técnica ayuda a los empleados a identificar y resolver los problemas que puedan surgir en la organización, ahorrando así tiempo y dinero fácilmente.

Por tanto, estos tipos de formación en la empresa son una inversión que merece la pena para aquellas organizaciones que se esfuerzan por mantenerse a la vanguardia en sus respectivos sectores.

Formación en materia de cumplimiento

Por su parte, esta abarca la instrucción y orientación que se aporta al personal sobre leyes, reglamentos o normas organizacionales. De esta forma, se garantiza que los empleados comprendan como mantenerse alejados de las infracciones.

La formación para empresas sobre cumplimiento es esencial para sectores muy regulados, como el financiero y el sanitario, pero también es necesaria para que todas las empresas preserven las normas éticas.

Pueden abordarse temas tan relevantes como las políticas antidiscriminatorias, la protección de datos o los protocolos de seguridad. La instrucción se imparte mediante diversos métodos como la formación online, presencial y los seminarios.

Formación en habilidades interpersonales

En el contexto actual, la formación en habilidades interpersonales es cada vez más importante. Las competencias técnicas siguen siendo valiosas, pero los empresarios reconocen como la comunicación, la resolución de problemas o el trabajo en equipo también resultan determinantes.

Para ejecutar con éxito un programa de habilidades blandas, es vital comprender primero las capacidades concretas que requieren atención. Esto puede hacerse mediante evaluaciones de los empleados. Posteriormente, se crea una formación para empresas a medida.

Ante todo, es esencial que la formación para empresas sea interactiva y atractiva. Por tanto, las clases magistrales son ineficaces a este respecto; en su lugar, deben usarse tácticas prácticas y de inmersión, como juegos de rol, actividades cooperativas o simulaciones.

La instrucción también debe ser continua, ya que el cultivo de las habilidades interpersonales es de carácter perpetuo. Con este enfoque, las empresas pueden mejorar la moral de los empleados, y, en última instancia, alcanzar sus objetivos empresariales.

Formación para el liderazgo

Esta modalidad de formación para empresas ayuda a los profesionales a comprender su estilo de liderazgo personal y cómo controlar eficazmente a los equipos. De esta manera, las personas pueden aprender a expresarse con claridad, dinamizar a su grupo o tomar decisiones estratégicas.

Así también se genera una cultura de excelencia, ya que el personal aprende a predicar con el ejemplo y a motivar a los demás para que hagan lo mismo. La formación en liderazgo es un componente fundamental que contribuye a crear una organización más próspera.

Formación en diversidad y sostenibilidad

Instaurar un lugar de trabajo diverso e integrador es una necesidad para que cualquier negocio alcance el éxito. Las empresas que defienden este ejemplo de formación laboral generan un ambiente positivo que mantiene a talentos variados, lo cual se traduce en un aumento de los beneficios.

Además, fomenta la competencia cultural, que es la capacidad de comprender, expresar y colaborar con personas de distintos orígenes. Con la globalización de la mano de obra, esta aptitud se ha vuelto clave.

Otra ventaja es que apuesta por la responsabilidad medioambiental. Las empresas que dan prioridad a la sostenibilidad e instan a su personal a hacer lo mismo tienen más probabilidades de atraer a muchos clientes concienciados.

Formación sobre productos

Este tipo de instrucción se centra en educar a los empleados sobre aquellos servicios que ofertan al mercado, para que puedan comprender cómo funciona, qué ventajas aportan y cómo promocionarlos con eficacia.

Es una manera de formación para empresas que puede ayudar a aumentar las ventas, mejorar la satisfacción del cliente y reforzar su posición general en un mercado competitivo.

Tipos de formación para empresas hoy

Formación bonificada

La formación bonificada es un sistema de financiamiento que permite a las empresas españolas capacitar a sus trabajadores a través de la bonificación de las cotizaciones a la Seguridad Social. Aunque existen programas similares en muchos países.

Este sistema se encuentra regulado por la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE), anteriormente conocida como Fundación Tripartita, y está dirigido a empresas que cotizan en el régimen general.

Las empresas pueden acceder a la formación bonificada mediante la presentación oficial de un plan anual que incluya el análisis de las necesidades formativas, la definición de los objetivos y la elección de los cursos requeridos para lograrlos.

Formación subvencionada

Este es un ejemplo de formación de una empresa financiada por una fuente externa, normalmente organismos gubernamentales u organizaciones sin ánimo de lucro. Por tanto, es una oportunidad ventajosa para que los negocios inviertan en su mano de obra sin grandes gastos.

Las ventajas incluyen la posibilidad de adquirir un plan de formación y capacitación de una empresa que, de otro modo, podría tener un coste prohibitivo, para proporcionar formación de calidad a sus empleados sin forzar el presupuesto.

Al participar en estos programas de formación para empresas, estas pueden asegurarse de que cumplen sus obligaciones y evitar posibles sanciones de organismos reguladores como la seguridad social.

Formación colaborativa entre compañeros

Esta formación para empresas consiste en que los compañeros se transmitan mutuamente sus conocimientos y experiencia. Supone una forma excelente de fomentar una cultura de aprendizaje en la oficina que aumenta el rendimiento.

Así es como mejora la comunicación y las aptitudes para resolver problemas. Además, la formación colaborativa puede ayudar a derribar muros dentro de la organización, ya que los trabajadores de diversos departamentos o disciplinas se reúnen para compartir sus recursos.

Formación online

En la era digital, la capacitación corporativa en línea se ha convertido en un elemento esencial de la formación para empresas, ya que ofrece una serie de ventajas, como la facilidad de acceso, la rentabilidad o la flexibilidad.

En el entorno online, las empresas pueden escoger entre una amplia variedad de cursos para satisfacer sus demandas particulares.

Uno de los beneficios más notables es que permite a cada miembro aprender a su propio ritmo. Esto implica que la plantilla puede tomarse todo el tiempo que necesite para comprender un tema determinado y sólo pasar al siguiente cuando esté preparado.

Además, se facilita el acceso desde cualquier lugar y en cualquier momento. Esto es especialmente útil para el proceso de formación de una empresa con un personal geográficamente disperso.

Los cursos online suelen ser más rentables que los presenciales tradicionales. Esto se debe a que los negocios no necesitan invertir en viajes, alojamiento y alquiler de locales.

Por otro lado, permiten a las empresas controlar el progreso de su personal. Las plataformas de formación online suelen llevar incorporadas herramientas de seguimiento y elaboración de informes personalizados.

Esto implica que pueden reconocer las áreas en las que el personal tiene dificultades y proporcionarles apoyo adicional. También se aportan datos sobre la eficacia general de sus programas de formación para empresas, ayudándoles a tomar decisiones informadas sobre futuras iniciativas.

Formación continua

Al ofrecer esta oportunidad, las empresas pueden mostrarse constantemente competitivas. Es un hecho que la formación continua aumenta el compromiso y la motivación de los empleados.

Con la introducción de nuevas tecnologías, la formación para empresas de carácter continuo es un componente vital de cualquier corporación moderna que pretenda estar a la cabeza en innovación.

Según el artículo académico “Situación actual y perspectivas de la formación corporativa” de Harvard Deusto, una de las principales tendencias en este ámbito reside en enfocarse en desarrollar un itinerario de aprendizaje constante a través del concepto “life long learning”.

Importancia de la formación en la empresa

Al destinar fondos a estos programas, los empleados mejoran las aptitudes y los conocimientos requeridos, con el consecuente aumento de rentabilidad en todas las áreas.  

Además, así se crea un entorno de aprendizaje dentro de la empresa. El personal que percibe como su empleador se dedica a su desarrollo profesional tiene más probabilidades de sentirse impulsado en su trabajo.

Otro gran beneficio es que se fortalece la cultura corporativa. Cuando los profesionales se forman al unísono, se desarrolla una comprensión compartida de los ideales y ambiciones de la empresa. Esto, a su vez, conduce a un equipo más cooperativo.

Así que no exageramos sobre la importancia de la formación empresarial, ya que desempeña un papel significativo en el bienestar y los logros de cualquier proyecto.

Por otro lado, estos programas ayudan a abordar las vulnerabilidades del personal, lo que, a su vez, potencia sus habilidades. Esto se traduce en una mejora automática de la calidad del trabajo.

6 ventajas de la formación interna para mejorar la rentabilidad de tu empresa

Invertir en formación para empresas puede aportar muchas ventajas de cara a favorecer la rentabilidad. A continuación, te muestro las más destacables:

Aumenta la motivación y la satisfacción de los empleados

Cultivar las habilidades interpersonales, entre otras, es vital para establecer conexiones positivas con compañeros y clientes, lo cual también conduce a una mayor sensación de logro.

Cuando el personal se siente seguro de sus capacidades para comunicarse eficazmente y gestionar su tiempo, es más probable que se sienta estimulado para asumir nuevas responsabilidades.

Al invertir en formación para empresas que haga hincapié en estas habilidades, se instruye una mano de obra más entusiasta, mejor equipada para sobresalir en el competitivo panorama.

 Mejora la retención del talento

Cuando los empleados experimentan crecimiento y progreso en sus funciones, es más probable que permanezcan en la empresa a largo plazo. Esto significa que puedes eludir los costes asociados a una elevada tasa de rotación laboral.

La formación para empresas es la clave para inspirar a que estos se queden en la organización y evitar puestos estancados. Así los profesionales se sentirán verdaderamente valorados.

Esto ofrece un beneficio mutuo, ya que los empleados se benefician de la ampliación de sus competencias, mientras que las empresas conservan a los talentos más valiosos del sector.

Fomenta la innovación

Los programas de formación para empresas que hacen hincapié en la creatividad proporcionan la oportunidad de cultivar una mentalidad que valore la inventiva y la resolución de problemas.

Además, los empleados que reciben orientación son más propensos a tener fe en sus capacidades, lo que puede catalizar la incorporación de nuevos conceptos a la organización.

El aprendizaje cooperativo es una forma extraordinaria de promover la innovación en el lugar de trabajo. Al reunir a tus empleados, puedes crear un espacio para el diálogo abierto y la lluvia de ideas.

Otra técnica para fomentar la invención es proporcionar a los empleados formación centrada en el pensamiento imaginativo, enseñando a abordar los problemas desde distintas perspectivas.

Manteniéndose al día de los últimos avances, los empleados pueden identificar las mejores oportunidades para crear nuevos productos que satisfagan las necesidades cambiantes de los clientes.

Combate los puntos débiles y refuerza las habilidades

Identificar y rectificar los puntos débiles de los trabajadores, no sólo les ayuda a rendir mejor, sino que también refuerza su autoconfianza y los prepara para el futuro en áreas específicas.

El resultado es una mejora significativa del rendimiento, una mayor autoestima y, en general, una plantilla más productiva. Así se pueden abordar las deficiencias a medida que surgen y garantizar que el personal siempre está acumulando nuevas habilidades.

Por último, se genera un equipo más adaptable y flexible. Esto ayuda a salvaguardar la empresa para gestionar con éxito cualquier reto que pueda surgir en el camino.

Fortalece la cultura corporativa

Esto implica inculcar valores, creencias o comportamientos que den forma a las operaciones de la empresa y a las relaciones tanto con los empleados como con las partes interesadas.

Los programas de formación para empresas que refuerzan la cultura corporativa pueden aportar numerosas ventajas entre las que resalta la de generar un sentimiento de pertenencia.

Al crear un entorno que permite la comunicación abierta y la retroalimentación, los empleados expresan abiertamente tanto sus ideas como las preocupaciones sin temor a repercusiones.

Además, un plan de formación de una empresa que celebra la inclusividad crea un ambiente acogedor y tolerante para todos, independientemente de su origen, valores o identidad.

Una cultura así debe valorar la asunción de riesgos, la experimentación y el ingenio, todo lo cual puede cultivarse mediante formaciones que den prioridad a estos rasgos.

Ofreciendo oportunidades de desarrollo personal y profesional, las empresas pueden inculcar un sentido de valor más allá de ganar un salario, lo cual finalmente reporta enormes beneficios.

Aumenta la productividad

La formación para empresas conduce a una mejora notable de la calidad del trabajo producido, así como a una reducción del tiempo necesario para realizar las tareas.

Además, los empleados que confían en sus capacidades son más propensos a tomar la iniciativa y laborar con rapidez. Educar en tecnologías innovadoras también es una garantía de cara a reforzar la eficacia.

Conclusiones sobre los 5 tipos de formación para empresas que puedes encontrar en la actualidad

No obstante, por desgracia, cuando se trata de formación para empresas, muchas empresas descuidan la importancia de la instrucción y el crecimiento persistente de sus trabajadores. Sin embargo, invertir en estos cursos es una estrategia empresarial inestimable.

De hecho, según el Informe de Estado de la Formación de 2021 de Udemy for Business, el 70% de los empleados encuestados cree que la formación en línea es esencial para su carrera profesional.

Por eso Mundana se focaliza en brindar conocimiento a todos aquellos interesados en formarse online a distintos niveles mediante nuestros clases particulares. Todo ello con una metodología verificada basada en la innovación educativa.

Te invitamos a conocer toda nuestra oferta de cursos, congresos y seminarios para que puedas cumplir todas tus metas desde donde quieras y a tu ritmo, también puedes contactar con nosotros que con gusto te ayudaremos.