8 claves para aprovechar la formación preuniversitaria y mejorar tus resultados

Seguro que ya estás familiarizado con el examen de ingreso a la universidad y el momento tan crucial que supone para miles de estudiantes cada año. Si próximamente serás tú el que se enfrente a este proceso, también te interesará familiarizarte con la formación preuniversitaria.

Sean cuales sean tus objetivos universitarios y al margen de tus calificaciones, la formación preuniversitaria potenciará y reforzará las habilidades académicas para lograrlos. Además, te ofrecerá la orientación para desenvolverte mejor en un nuevo ámbito o para decidir qué camino puedes tomar.

Puede ofrecerse a través de la educación tradicional o a través de academias especializadas, que amplían la variedad de recursos a tu alcance. Más allá de lo que escojas, debes saber cómo sacar el máximo partido a este recurso.

Pero será esencial que estés informado a la hora de elegir un centro de formación preuniversitaria, así como que conozcas ciertas claves fundamentales que van a favorecer que mejores tus resultados y aumentes tus conocimientos a través de este artículo.

¿Qué es la formación preuniversitaria?

Se trata de una etapa en la que como estudiante te podrás preparar para tu ciclo universitario gracias a la orientación que la formación preuniversitaria te ofrece, adquirirás conocimientos y los reforzarás mediante la práctica específica para tus exámenes de acceso.

En España, por ejemplo, esta formación preuniversitaria sería el bachillerato, pero tiene diferentes denominaciones y modalidades dependiendo del país en el que te encuentres. Aun así, siempre se ofrecen formaciones al margen de la enseñanza tradicional, que seguramente podrán adaptarse mejor a tus necesidades.

La formación preuniversitaria se caracteriza por adaptar sus contenidos a los futuros intereses académicos y laborales de los alumnos. Estos cursos ofrecen distintas áreas de conocimiento para escoger en la que quieres comenzar a especializarte como preuniversitario; los docentes además suelen ser expertos en las mismas.

Además, la formación preuniversitaria se ajusta tanto a estudiantes que necesitan reforzar y mejorar ciertas competencias porque sus calificaciones han sido peores, como a ti si ya cuentas con la base de conocimientos suficiente, pero quieres potenciar tus habilidades para asegurarte de alcanzar tus metas.

En definitiva, la formación preuniversitaria se considera la vía de acceso hacia la educación superior, ya que se ha demostrado que es la mejor manera de alcanzar la máxima calificación en el examen de acceso, también conocido como selectividad.

¿Es recomendable hacer la formación preuniversitaria?

Hay múltiples razones por las que sin duda es recomendable realizar una formación preuniversitaria. Algunas de las ventajas por las que esta enseñanza es tan destacable son que te informa y orienta respecto a tu futuro profesional y académico.

También te entrena específicamente para tu prueba de acceso, te aporta conocimientos adicionales, además de técnicas y hábitos de estudio. Es una formación que acompaña al adolescente preuniversitario durante una de las etapas más cruciales de su vida.

 Es una fase vital, habitualmente marcada por la indecisión a la hora de escoger qué camino seguir, de ahí la importancia de la orientación y el autodescubrimiento que proporciona la formación preuniversitaria, que puede ser fundamental para evitar tomar decisiones tan importantes de forma precipitada.

Por otro lado, si te ves capaz de estudiar por tu cuenta con los materiales que te aporta únicamente tu centro de enseñanza, siempre puede ser una opción; sin embargo, la mejor opción para lograr los objetivos deseados será formarnos con la ayuda de una academia preuniversitaria.

 Estos centros cuentan con la experiencia necesaria para establecer unos horarios de trabajo adecuados y adaptarse a tus necesidades personales. Seguramente contarán con numerosos recursos digitales, con la posibilidad de impartir clases particulares y posiblemente de revisarlas cuando lo necesites.

¿Qué debes tener en cuenta a la hora de elegir una academia para realizar tu formación preuniversitaria?

Es valioso que la academia preuniversitaria, por ejemplo, imparta lecciones en directo, ya sea a través de clases virtuales o presenciales, es decir, en las que puedas interactuar con el profesor para así poder formularle tus dudas.

Además, siempre será un punto a favor si la academia cuenta con una plataforma online para revisitar clases o que ponga a disposición del preuniversitario contenido adicional de apoyo. También, por supuesto, es importante que te fijes en que haya numerosos ejercicios para practicar y repasar específicamente tu examen de acceso.

Otra de las claves para asegurarte de que esa academia preuniversitaria es la adecuada, es comprobar los resultados que suelen obtener sus alumnos en las pruebas de ingreso. Debes verificar cuántos de sus estudiantes consiguen acceder a la universidad y obtener el resultado que perseguían.

Por último, presta atención a si cuentan con servicios de orientación al preuniversitario y a si ofrecen planes de estudio u organización. En este sentido, la enseñanza en modalidad online es ventajosa, ya que te proporcionará flexibilidad a la hora de atender a la formación.

Las 8 claves para mejorar los resultados de tu formación preuniversitaria

Realiza todos los modelos de examen y ejercicios que puedas

Familiarizarte con la estructura del examen a través de la realización de ejercicios de años pasados será crucial para mejorar tus resultados; es seguro que tu formación preuniversitaria te proporcionará estos modelos, así como la posibilidad de corregirlos con profesores expertos.

Organiza la materia mediante esquemas y guías

Cuando dispones de grandes cantidades de información que procesar, a veces la mejor forma de hacerte una idea general de cara a organizarte es mediante una imagen visual.

 Se trata de que clasifiques el temario, apliques códigos de colores y de que, a partir de ahí, puedas realizar una guía de estudio a la que recurrir para orientarte rápidamente.

Prioriza el contenido realizando resúmenes

Seguro que los contenidos que debes estudiar son tan extensos que será imprescindible resumirlos, para que sean manejables sin perder información esencial. Asimismo, por ejemplo, si una asignatura se te dificulta, quizá debas priorizarla dentro de tu plan de estudios e informar de esto a tus profesores.

Estructura tu tiempo y establece descansos

Aunque en este periodo tu preparación académica te ocupará gran parte del tiempo, siempre debes dedicar un espacio al descanso para evitar alcanzar el agotamiento mental.

Asimismo, es imprescindible que organices tu tiempo de estudio. Hay multitud de técnicas que se recomiendan específicamente para aumentar la productividad en el estudio.

Algunos ejemplos son el método Pomodoro, el método Flowtime o la técnica de hacer una lista de prioridades, ordenada con números de mayor a menor importancia, de tus tareas cada día.

La efectividad del método Pomodoro está más que comprobada científicamente, ya que es quizá uno de los más célebres; mediante esta técnica se pretende fomentar tu capacidad de concentración y realizar una gestión productiva del tiempo de trabajo.

Este se reparte en sesiones de únicamente 25 minutos, tras las que se encuentra una pequeña recompensa a modo de descanso de 5 min por cada intervalo de trabajo completado. Una vez se completan cuatro intervalos de trabajo, la idea es poder premiarte con un descanso largo de unos 15 a 30 minutos.

A partir de esta técnica, nace el método Flowtime que según tus preferencias puede suponer una mejora del anterior.

 Ahora lo que harás será concentrarte en realizar una sola tarea y comenzar a cronometrar hasta que sientas que comienzas a distraerte y necesitas un descanso.

 A partir de ahí se registran esos tiempos personalizados y con ellos volvemos a comenzar a trabajar, en lugar de seguir estrictamente los tiempos que te marca el método Pomodoro.

Cuida tu salud física y mental

Durante la formación preuniversitaria será esencial que inviertas tu energía en otras actividades y hobbies de carácter recreativo que también te motiven. La motivación es clave para adquirir hábitos saludables como cuidar la alimentación o practicar deporte, que solo facilitarán el camino hacia la satisfacción de tus metas académicas y vitales en general.

Aprovecha las clases para comprender y atender

Aunque ya se ha mencionado que tomar apuntes es un punto importante, durante las clases lo más recomendable será que estés lo más presente posible para comprender las explicaciones. De esta forma, si no comprendes algo en ese momento, podrás aprovechar para aclarar tus dudas.

Es frecuente encontrar a alumnos que tienen reparos a expresar sus dudas en clase, pero para aprovechar al máximo tu formación preuniversitaria recuerda que la función de los profesores es brindarte ayuda e incluso consejo académico.

Si tienes opción de revisitar las clases, este será el momento idóneo para que tomes apuntes, y así al mismo tiempo repases todo lo que ya has comprendido durante la lección; escribir rápidamente mientras habla, el profesor solo obstaculizará tu progreso durante la formación preuniversitaria.

Conoce tus objetivos universitarios

Si desde un principio en tu formación preuniversitaria manifiestas cuáles son tus metas será sencillo orientar tus planes de estudio y establecer prioridades. Tampoco es necesario que tus planes de futuro sean concretos, pero al menos sí debes tener claras ciertas opciones.

Encuentra un lugar de estudio adecuado

Antes de comenzar la formación preuniversitaria reflexiona sobre dónde vas a prepararte durante esta etapa de tu aprendizaje. El lugar debe contar con luz natural suficiente, ser relativamente espacioso, disponer de enchufes para cargar tus dispositivos, pero sobre todo debe ser tranquilo a nivel sonoro.

7 consejos para presentar el examen de admisión a la universidad

Evita estudiar horas antes del examen

Si queda poco tiempo para repasar y vuelves a revisar la información es posible que esto sea contraproducente. Siempre hay algún dato que puedes haber olvidado, y darte cuenta de ello a pocas horas del examen te producirá una sensación de ansiedad e inseguridad general, solo lograrás saturarte.

Duerme y aliméntate bien

Por el contrario, realizar tu prueba con la mente clara y relajada, así como con el cuerpo descansado será la clave para que la superes de forma satisfactoria. La mejor vía para lograrlo es a través de seguir hábitos saludables de alimentación y sueño, sobre todo en los días previos al examen.

Comienza con aquello que mejor sepas

A la hora de enfrentarte al examen, también hay ciertas claves para superarlo que serán decisivas en el resultado que obtengas. La primera de ellas es que empieces por responder las preguntas que estés seguro de conocer, de esa forma te aseguras unos puntos al comenzar y adquieres confianza para el resto de la prueba.

Otra forma de maximizar tu calificación será ofrecer un extra, además de responder a la pregunta intenta realizar un análisis y argumentación. De esta manera, el profesor aparte de entender que has memorizado los conocimientos asumirá que los has comprendido, ya que también puedes realizar tu propia reflexión sobre el temario.

Pon atención a la presentación del examen

Como ocurre en la vida, la primera impresión siempre es importante. Si sencillamente tu examen tiene una presentación limpia, en la que se respetan los márgenes o la letra es legible y estética, ya estás aumentando tus posibilidades de mejorar la calificación. 

Lee siempre atentamente los enunciados

Los errores y confusiones a causa de leer erróneamente el enunciado son muy comunes. Esto ocurre porque en este tipo de pruebas, siempre se cuenta con un tiempo limitado y los nervios pueden jugar una mala pasada.

Sin embargo, es vital analizar las preguntas para poder proporcionar las respuestas acertadas. Incluso si hay varios datos puedes realizar un pequeño esquema aparte, que te ayude a reorganizar las ideas para evitar confundirte.

Los esquemas también pueden ser útiles para exponer una pregunta de desarrollo en la que hay que tratar varios puntos extensos, ordenarlos previamente de forma visual porque lejos de suponer una pérdida de tiempo te supondrá una gran ayuda.

Revisa el examen

Reserva un tiempo extra para releer todo el examen antes de entregarlo. Así podrás pulir detalles, corregir fallos y comprobar tus respuestas desde un punto de vista más relajado.

Recuerda el vocabulario y la ortografía

Al igual que ocurre con el aspecto general del examen, la riqueza de palabras que uses y la capacidad de utilizarlas correctamente suponen una carta de presentación fundamental para tu corrector, por eso debes cuidar la ortografía.

Además, aunque a veces desconozcas una respuesta, si tienes la habilidad de explicarte con claridad esto siempre supondrá un punto a tu favor, y viceversa. Ciertos exámenes incluso penalizan por cada falta de ortografía cometida.

Conclusiones sobre cómo aprovechar la formación preuniversitaria y obtener más ventajas para el ingreso en la universidad

En definitiva, la formación preuniversitaria es una etapa educativa esencial si quieres acceder a la educación superior satisfactoriamente y saber manejarte en un nuevo ambiente con toda tranquilidad. ¿A qué esperas para convertirte en estudiante preuniversitario?

En Mundana dentro de muy poco tiempo también te ofreceremos la oportunidad de convertirte en uno gracias a nuestra propia formación preuniversitaria. Te ofreceremos clases virtuales adaptadas a tu propio horario y necesidades, especializadas en alcanzar el máximo resultado en la prueba de selectividad.

 Te invitamos a conocer toda nuestra oferta de cursos, congresos y seminarios para que puedas cumplir todas tus metas desde donde quieras y a tu ritmo, también puedes hacer contacto con nosotros que con gusto te ayudaremos.

En la parte de abajo, déjanos un comentario contando qué te pareció este artículo y si te ayudó a conocer sobre 8 claves para aprovechar la formación preuniversitaria y mejorar tus resultados, o también si tienes alguna duda o sugerencia, así podremos contar con tu valioso aporte.